Si no vendes lo que quieres, estás COMPRANDO EXCUSAS DE TUS CLIENTES
En el MUNDO INMOBILIARIO, las excusas están a la orden del día. «Es que no sé si es el momento de comprar», «voy a pensarlo un poco más», «el perro de mi vecino tiene un mal presentimiento sobre esta casa». EXCUSAS. Y tú, como agente, tienes dos opciones: comprar esas excusas o venderles su futuro hogar.
Porque aquí va la verdad que nadie te cuenta: SI ELLOS NO SE DECIDEN, TÚ NO COBRAS. Y no, no hablo de presionarles como si les estuvieras vendiendo un reloj en un bazar. Hablo de entender sus miedos, derribarlos y hacer que se den cuenta de que la casa perfecta no es algo para pensárselo toda la vida.
Te doy unos CONSEJOS RÁPIDOS para dejar de comprar excusas y empezar a vender sueños (y cerrar ventas):
1. HABLA DE BENEFICIOS, no de metros cuadrados: A nadie le emociona una casa de 120m². Pero si les dices: «Aquí pueden montar ese estudio para trabajar desde casa que siempre soñaron», las cosas cambian. Habla de cómo se verá su vida en esa casa, no de los ladrillos que la sostienen.
2. ESCUCHA MÁS QUE ELLOS MISMOS: Muchas veces el cliente no sabe lo que quiere hasta que tú se lo pones delante. ¿Crees que los influencers sabían que necesitaban un ring light? Lo mismo con las casas. Pregunta, escucha y guíales hacia su propio «sí».
3. ELIMINA SU MAYOR MIEDO: La mayoría no compra porque teme cometer un error. Tú estás ahí para decirles: «El mercado no espera y esta casa no estará aquí el mes que viene». Pero dilo con confianza, no como si te estuvieras quedando sin pan en la tienda.
4. CIERRA CON SENTIDO DE URGENCIA (pero no agobies): ¿»Lo pienso y te aviso»? No. Eso es perder el control de la venta. Dales una razón para decidirse hoy: «Si te decides ahora, negociamos que incluyan esos electrodomésticos que te encantaron».
5. MUESTRA EMPATÍA SIN PERDER EL FOCO: Claro que entiendes que comprar una casa es una decisión importante. Pero no les vendas como si fuera una operación a corazón abierto. Diles: «Entiendo que esto es grande, pero por eso estoy aquí, para que sea fácil y seguro».
Recuerda esto siempre: ellos no están comprando ladrillos, ventanas o una parcela con piscina. Están comprando el lugar donde construirán su vida. Tú, como agente, ERES EL PUENTE ENTRE SUS DUDAS Y SU DECISIÓN. Así que no compres excusas. Vende soluciones.
¿Qué te parece? ¡Ya estás a un paso de cerrar esa próxima venta!
Ahora te toca a ti: ¿Cuál es la excusa más absurda que has escuchado como agente inmobiliario? ¡Déjala en los comentarios y démonos unas risas mientras aprendemos juntos! 👇
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